Si bien su origen de clase media alta y acomodada le auguraba un futuro profesional y social típico de las élites, con un buen empleo, una casa por demás confortable, y una familia que respeta la tradición, su corta vida, fue asesinada a los 32 años, fue todo lo inesperado y contrario: una ferviente militante comunista que tomó las armas para resistir la dictadura del General Augusto Pinochet.
Se jactaron y reconocieron haber atentado infructuosamente contra el propio Pinochet, asesinaron a Jaime Guzmán, senador y estrecho colaborador del general, y perpetraron varios secuestros extorsivos como el del empresario Cristián Edwards, hijo del propietario del popular e influyente periódico El Mercurio.
Su nacimiento se produjo en 1956, en Chile, y estudió en los mejores colegios del país.
Primeramente se sumó a las Juventudes Comunistas y luego al FPMR.
Adoptó el seudónimo de Comandante Tamara y fue la única mujer del grupo que llegó a ocupar cargos jerárquicos.
Corría el año 1986 y el dictador regresaba de pasar unos días de descanso en una residencia ubicada en la localidad de El Melocotón, que terminó trágicamente con varios heridos y cinco muertes, aunque, el objetivo de asesinar al poderoso Pinochet no se cumplió porque resultó ileso.
Le asestaron un golpe a la guardia de carabineros en la cual los redujeron y robaron armas, sin embargo, se presume que luego los oficiales dieron con parte del grupo guerrillero y los detuvieron.
Junto a ella flotaba también asesinado su pareja y compañero Raúl Pellegrin.
Su homicidio aún hoy sigue sin una resolución definitiva.
Autor: Redacción Quien.NET