Biografía de Mamá Antula (María Antonia de Paz y Figueroa)

Mamá Antula, cuyo nombre es María Antonia de Paz y Figueroa, es una santa argentina. Precursora de la lucha a favor de los derechos humanos. Fue canonizada por el Papa Francisco en 2024 y se convirtió en la primera santa nacida en Argentina. Desarrolló una fantástica tarea evangelizadora junto a la Compañía de Jesús (Jesuitas) antes y después que estos fuesen expulsados del territorio. Desafiando las costumbres de la época se vistió con un hábito y predicó la palabra de Dios, en quechua, a las comunidades originarias del norte argentino. Su influencia se sintió entre los promotores de la Revolución de mayo de 1810, en el Virreinato del Río de la Plata. Actuó como consejera y guía espiritual de varios de los patriotas que participaron de sus ejercicios espirituales. Fue una pionera, sin proponérselo, en igualar los derechos entre hombres y mujeres, dentro de un contexto social en el que mandaba el respeto a la estructura jerárquica y patriarcal. Su mayor reconocimiento se produjo póstumamente. En vida debió padecer que la considerasen al mismo tiempo una bruja y loca. Instaló en Argentina la imagen y devoción por San Cayetano y lo designó patrono de su organización.

1730

Nació en la localidad de Silípica, en la provincia argentina de Santiago del Estero, en el seno de una familia perteneciente a la nobleza local. Su nombre completo es María Antonia de Paz y Figueroa.

El origen de su apodo “Mamá Antula” derivó del hecho que, cuando dejó su provincia natal. mantuvo solamente su nombre de pila: María Antonia y le anexó el apellido San José. Antula fue la denominación en quechua que, en el norte del país, les daban a las mujeres llamadas Antonias; el agregado de Mamá estuvo vinculado al trato y vínculo maternal que profesaba naturalmente.

1745

Rechazó el matrimonio que su familia le arregló, tal era la costumbre de ese tiempo entre las jóvenes de su clase, e ingresó en un convento. Tenía 15 años, una fuerte devoción por Dios y una enorme sensibilidad social y espiritual.

Asumió los votos de castidad y pobreza y abandonó la casa familiar ante el rechazo que despertó en su padre la decisión de dedicar su vida entera a la predica de la palabra de Dios.

Se integró a la Compañía de Jesús como laica, y en un acto considerado una máxima disrupción, empezó a vestirse de varón e inició su tarea evangelizadora.

1767

El Rey Carlos III ordenó la expulsión de los Jesuitas del territorio y todo el trabajo social y espiritual que realizaban. Demostró su valentía, desafió a las autoridades locales y de la metrópoli y tomó la posta jesuítica.

Recorrió a pie más de 4.000 kilómetros cuadrados del Virreinato del Perú (conformado por las actuales provincias de Catamarca, Santiago del Estero, Tucumán, Salta, Jujuy, Córdoba y La Rioja) con la misión de evangelizar a las comunidades indígenas residentes allí. También se ocupó de alfabetizarlos y de ayudarlos a perfeccionar las técnicas de los oficios que practicaban.

Sostuvo que recibió un mensaje espiritual que la animó a convertirse en la heredera e hija de la Compañía de Jesús.

1768

Desplegó con enorme compromiso la prédica de la palabra de Dios, a través de los ejercicios espirituales que crearon los jesuitas para salvar las almas.

Por otro lado, organizó una serie de cursos para enseñarles a los participantes dichos ejercicios. Consistieron en 10 días de retiro y reflexión durante los cuales ella asumió el rol de guía espiritual. Practicaban meditaciones, hacían ejercicios mentales y rezaban. El objetivo de su creador (Loyola) fue examinar la conciencia, razonar, contemplar y preparar el alma para eliminar las afecciones desordenadas y encontrar la voluntad de Dios. Contó con el apoyo del Obispo de Santiago del Estero para realizar los encuentros.

1779

Se asentó en Buenos Aires con la idea de establecer allí los ejercicios, sin embargo, se encontró con la resistencia del virrey y del obispo. A pesar de ello, el interés de los habitantes pudo más y los realizó de modo clandestino con una gran afluencia de público. Finalmente, la presión popular, logró la autorización del Obispo, e incluso se le permitió la construcción de la Santa Casa de Ejercicios Espirituales, en la actual avenida Independencia 1190, en la ciudad de Buenos Aires.

Vale mencionarse que, dichos eventos que convocaron a multitudes incluyeron a varios próceres de aquellos tiempos: Manuel Belgrano, Santiago de Liniers y Miguel de Azcuénaga, entre otros.

Cabe destacarse que a estos ejercicios no solamente asistió la elite de Buenos Aires (funcionarios, nobles, comerciantes), sino también hombres de campo y hasta esclavos, porque el objetivo se propuso que fuesen un momento de encuentro fraternal.

1795

Construyó la Santa Casa de Ejercicios, uno de los edificios más antiguos de la ciudad de Buenos Aires, que sigue en funcionamiento, y mantiene imperturbable el legado de la Compañía de Jesús.

Desde allí desarrolló una intensa tarea de asistencia social a favor de las mujeres sin hogar y de los niños abandonados. Les dio casa, protección, alimentos, ropas, y hasta les atribuyó el apellido “San José”.

Por otra parte, intervino en la certificación de conducta de los seminaristas aspirantes a ordenarse como sacerdotes, a través de los ejercicios espirituales. Su favor o veto fueron tenidos muy en cuenta.

En la actualidad la Santa Casa de Ejercicios Espirituales sigue desarrollando la misión de Mamá Antula y permanece bajo la dirección y protección de la Congregación Hijas del Divino Salvador.

07/03/1799

Falleció en Buenos Aires, a los 69 años. Sus restos fueron inhumados en la Basílica Nuestra Señora de la Merced; luego se trasladaron dos veces, primero, a la Basílica de Santo Domingo, y finalmente reposan en la Iglesia de Nuestra Señora de la Piedad, en la ciudad de Buenos Aires.

Milagros

El primer milagro que se le atribuyó fue la milagrosa sanación de la hermana Rosa Vanina, integrante del Instituto de las Hijas del Divino salvador. Presentó un grave cuadro de colecistitis, que se aceleró rápidamente ante la falta de antibióticos de la época. Se le pidió a ella que intercediese a favor de la salud de Rosa y el milagro de la curación sucedió. Se produjo en el año 1904 y se documentó el siguiente año. El Vaticano lo aceptó oportunamente y el 2 de julio de 2010, el papa Benedicto XVI, la proclamó venerable. Más tarde, el Papa Francisco habilitó el proceso para nombrarla beata.

En ese entonces se sumó a la lista de beatos que dispone la Iglesia Argentina: El padre José Gabriel Brochero, Nazaria March Mesa, María Crescencia Pérez, Ludovica de Angelis, María del Tránsito Cabanillas, Ceferino Namuncurá, Laura Vicuña y Artémides Zatti.

El segundo milagro que se le adjudicó fue otra curación, la de Claudio Perusini, oriundo de la provincia de Santa Fe, en Argentina, y nacido en el año 1959.

En 2017, Claudio, padeció un ictus isquémico más un infarto hemorrágico en diversas partes del organismo que derivó en un fallo multiorgánico. El pronóstico médico, sentenció, en ese momento que, la recuperación era imposible por las lesiones cerebrales irreparables producidas.

Sin embargo, sus familiares y amigos realizaron una cadena de oración dirigida a ella y al cabo de 28 días sucedió el milagro de su mejoría; meses después, pudo recobrar su autonomía.

1905

Un grupo de obispos argentinos le solicitaron al Papa Pío X la introducción de la causa de su beatificación. Al año siguiente se finalizó el proceso y se elevó a Roma. En 1917 el Papa Benedicto XV firmó el decreto que introdujo su causa. Doce años después, el Papa Pío XI la declaró venerable.

27/08/2016

Fue beatificada por el Papa Francisco.

2023

La Congregación de las Causas de los Santos del Vaticano anunció su canonización luego de aprobar su segundo milagro.

02/2024

Fue canonizada por el Papa Francisco y se convirtió en la primera santa nacida en suelo argentino. La ceremonia se celebró con una misa en la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.

Veneración

El Papa argentino es un fiel devoto de ella. Cuando se desempeñó como arzobispo de la Ciudad de Buenos Aires era habitual que la mencionase en sus homilías.

Su festividad se celebra anualmente, cada 7 de marzo, día de su fallecimiento. Los atributos que la destacan son una cruz y el hábito. Es la patrona de las Hijas del Divino Salvador y de mujeres empresarias. Dispone de un santuario en su provincia natal.


Escrito por Editorial para la Edición #134 de Enciclopedia Asigna, en 03/2024.